La UD Las Palmas afrontó este martes una nueva sesión de entrenamiento en Telde con la vista en el encuentro del próximo domingo frente al Alavés, en el que los amarillos intentarán reencontrarse con el camino de la victoria para seguir haciéndose fuerte en el Estadio Gran Canaria y asegurar la permanencia de manera matemática. Algo que sucederá si se imponen al Alavés ya que 41 puntos los amarillos serían inalcanzables, pero también dependiendo de lo que haga el Sporting de Gijón en su visita al Osasuna y del resultado que el Granada CF en el Sánchez Pizjuán frente al Sevilla. Se podría dar el caso de que los amarillos estuvieran ya salvados incluso antes de disputar el partido ante los vitorianos. Lo que está claro es que dependen de sí mismos para conseguir el objetivo con cinco jornadas de antelación.
El cuerpo técnico apretó a los jugadores a fin de llegar al encuentro ante los vitorianos en las mejores condiciones posibles y el entrenamiento se extendió más de dos horas. Vicente y Viera trabajaron a menor ritmo.