García Pimienta revolucionó el once de los amarillos en este primer partido intersemanal, firmándose así el debut en Primera del defensa satauteño Eric Curbelo. Salvo en la portería, hubo novedades en todas las líneas del once grancanario, en el que también se registró el regreso a la competición del holandés Sinkgraven.
El primer periodo ya registró como pieza estelar al portero Álvaro Valles. El Real Madrid dominó de principio a fin esta primera fase del encuentro, con un número alto de oportunidades que no fraguaron hasta que Brahim estableció el 1-0 en la última jugada del primer acto.
El meta sevillano de la UD Las Palmas logró rechazar o detener hasta ocho remates del conjunto merengue. Con las piernas, con sus guantes, a ras de suelo, a quemarropa, … Valles lograba intervenir para mantener la esperanza visitante en un partido de claro signo madridista.
Las Palmas no lograba aparecer en los espacios defensivos de su rival. Sus posesiones no eran lo suficientemente largas o profundas, añadiendo pérdidas que permitían las cargas del conjunto de Carlos Ancelotti.
Cuando parecía que el partido iba a alcanzar la tregua sin movimientos en el marcador, Brahim logró colocar el 1-0 con un chut inapelable para Valles en la última jugada del primer periodo.
Las Palmas daba muestras de mejoría en el segundo periodo cuando se elevó el 2-0 al tanteador, en la primera acción de ataque del equipo de Ancelotti. Joselu pudo superar a Valles con un cabezazo certero, con trayectoria diagonal para entrar junto al poste.
La segunda parte tuvo otra orientación, decayendo de manera notable el ritmo de los locales. La presencia de Kirian animó a la organización del juego de los grancanarios, que tuvieron mayor presencia y gozaron generar algunas llegadas hacia el área de Kepa. El peligro, por el contrario, se alejó de Álvaro Valles. El meta de La Rinconada tuvo menos trabajo entonces porque el balón estuvo más tiempo en campo del Real Madrid.
Hasta la última jugada Las Palmas intentó recortar la distancia. Quizá su mejor oportunidad estuvo en las botas de Marvin Park en la última jugada de la tarde, pero el chut del balear no encontró el camino de la portería madridista.
