Las Palmas Atlético cae por la mínima en el feudo del Tenerife B (1-0)
El equipo de Manolo Márquez, intentó anotar de todas las maneras posibles, pero se encontraron con un ordenado CD Tenerife 'B' que defendió su ventaja con uñas y dientes. Los amarillos siguen sin encontrar el camino del triunfo.
FICHA TÉCNICA:
CD TENERIFE B, 1: Ángel Galván; Óscar, Nahuel, Gopar, Portilla, Fede, Marwan, Bolaños, Younousse, Ale Pipo y Adrián García. Banquillo: Torres, Dani Hernández, Calem, Giovanni y Darixon. Entrenador: Kike de Diego.
UD LAS PALMAS ATLÉTICO, 0: Guanche; Sito, Borja, Álex Suárez, Ismael, Pablo, Benito, Fuli, Juanma, Carlos y Yeremi. Banquillo: Eric, David, Enrique Castaño, Raúl Alemán y Ronaldo Peña.
GOLES: 1-0, Calem, minuto 43.
ÁRBITRO: Marta Huerta de Aza (Comité tinerfeño).
INCIDENCIAS: Campo número dos de la Ciudad Deportiva Javier Pérez. Grupo XII de Tercera División, jornada 6.
CRÓNICA:
Con mucho respeto afrontaron los dos equipos la primera media hora de juego. Partido igualado entre el CD Tenerife B y Las Palmas Atlético, con escasas ocasiones. Juanma fue uno de los que se atrevió a romper con el tedio, con una acción ofensiva que puso en apuros al equipo tinerfeño.
Los amarillos estaban muy motivados, intentaban romper la racha de tres partidos consecutivos empatando, para dar un golpe sobre la mesa en casa en territorio hostil, deportivamente hablando. Así se llegó a la media hora de partido, en un partido con más emoción que juego.
El ex amarillo Pipo lo intentó con un lanzamiento que detuvo Guanche. A medida que se acercaba el intermedio el partido se abría, dejando más opciones para la ofensiva y menos para las precauciones. De nuevo Pipo pateó la pelota y Ale Guanche volaba para evitar el primer tanto blanquiazul, en un balón envenenado. Se olía el peligro y en el minuto 43 Calum anotaba un golazo de libre directo para establecer el (1-0) con el que se llegaba al descanso.
En la segunda parte el equipo de Manolo Márquez, que introdujo a Ronaldo y más tarde a Enrique Castaño, buscaba el empate y la posterior remontada, una empresa complicada dada la solvencia mostrada por los blanquiazules, que no se desordenaban. Fuli trató de dinamitar la resistencia local, pero el gol no llegaba y el tiempo volaba. Borja lo intentó desde lejos. Así se atravesaron los últimos minutos, en los que Pipo estuvo cerca de matar el partido. Al final se consumó la derrota del filial, que sigue sin encontrar el camino del triunfo.
